viernes, 16 de septiembre de 2011

24 de Agosto, 00:15

Beber, desde luego. Esperar no, retar a la Señora Muerte en compañía del Gorrión Rojo y una botella de whisky; sonreirle cínicamente y desear sus armas de seducción para en el último momento, justo antes del primer gemido, vencerla con un coitus interruptus.

No es mi hora Buck, no puede ser mi hora¡¡¡¡, ya no distingues entre tu vida y tus escritos. Has convertido tu vida en un tabloide y crees poder moldearla al son de las cervezas y las putas, al ritmo de una calle solitaria asfaltada con tacones solitarios y desahogos esquivos en la memoria.

No puedes, ni la tuya ni la mía. Así que beber es la opción, el camino elegido y el destino final. Pelear, rebelarse, robar los taxis a las ancianas, irse sin pagar........estar vivo.

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